Microsoft traslada su producción fuera de China y reducir riesgos geopolíticos
El informe asegura que Microsoft ha pedido a varios de sus proveedores internacionales que se preparen para el traslado de la fabricación de Xbox, Surface y servidores empresariales a otros países. Este movimiento estratégico responde a la necesidad de evitar posibles interrupciones en la cadena de suministro derivadas de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
La medida llega justo cuando el expresidente Donald Trump ha amenazado con imponer aranceles del 100 % a los productos chinos. En este contexto, Microsoft traslada su producción fuera de China para mantener la estabilidad de su cadena de producción global y asegurar su competitividad frente a otras tecnológicas como Apple o HP, que también han iniciado reubicaciones.
Impacto del traslado en Xbox y la industria del videojuego
Fuentes cercanas señalan que la decisión también afecta a la fabricación de consolas Xbox. Aunque aún no se ha confirmado una mudanza total de las líneas de ensamblaje, Microsoft habría solicitado que al menos el 80 % de los materiales utilizados en sus servidores y dispositivos provengan de fuera de China. Este cambio podría alterar la estrategia de distribución de Xbox, especialmente ahora que la compañía prepara su nueva generación de consolas.
Además, parte de la producción ya se habría trasladado a países como Vietnam, India y México, con el fin de optimizar costes y reducir riesgos logísticos. Este reajuste se suma al fortalecimiento de su infraestructura tras algún que otro fracaso para recomponerse, algo que es una pieza clave en su estrategia de crecimiento internacional.
Por qué Microsoft traslada su producción fuera de China
La decisión de Microsoft de trasladar su producción fuera de China refleja una tendencia general entre las grandes empresas tecnológicas hacia la diversificación geográfica. El objetivo es crear una red manufacturera más resiliente ante conflictos geopolíticos, fluctuaciones de costes o problemas de abastecimiento.
En este sentido, la compañía busca replicar un modelo de producción distribuida que le permita fabricar dispositivos Surface, Xbox y equipos empresariales desde distintas regiones del mundo, fortaleciendo su posición en el mercado global y reduciendo vulnerabilidades.
Un cambio estratégico con repercusiones globales
Este movimiento marca un punto de inflexión en la historia industrial de Microsoft. Tras décadas dependiendo del ecosistema manufacturero chino, el gigante de la tecnología apuesta por un sistema más equilibrado y sostenible. Según Nikkei Asia, la empresa pretende tener su nueva estructura productiva plenamente operativa antes de marzo de 2026, con el objetivo de alcanzar un modelo de producción descentralizado y eficiente.
Más allá del impacto económico, esta decisión también podría tener consecuencias para el sector del videojuego, ya que la fabricación de consolas Xbox fuera de China podría influir en precios, logística y tiempos de lanzamiento. Sea como sea, está claro que Microsoft traslada su producción fuera de China con una visión de largo plazo que redefinirá su papel en la industria tecnológica global.















