Apagar correctamente la PS5 puede parecer una simple rutina, pero hacerlo mal puede traerte más de un quebradero de cabeza. Desde mensajes de error como “reparando almacenamiento interno” hasta posibles daños en el SSD, este gesto cotidiano tiene más impacto del que imaginas. En esta guía te contamos todo lo que necesitas saber para proteger tu consola.
Uno de los más comunes es el mensaje de “se está reparando el almacenamiento interno”, que aparece cuando el sistema detecta un apagado anómalo y necesita verificar si ha habido daños. A continuación, te explicamos qué implica este aviso, los riesgos reales que conlleva y, lo más importante, cómo puedes evitar que vuelva a ocurrir.
¿Por qué es importante apagar correctamente la PS5?
Cuando la PS5 no se apaga correctamente, el sistema puede detectar un cierre inadecuado de procesos o una interrupción durante la escritura de datos. Para evitar consecuencias mayores, al volver a encender la consola se ejecuta automáticamente una verificación de errores en el disco o SSD interno.
Este mensaje aparece habitualmente si:
-
Se produce un corte de luz mientras la consola está encendida o en reposo.
-
Desenchufas la PS5 directamente sin apagarla desde el sistema.
-
Pulsas el botón físico de apagado sin usar el menú.
Durante la reparación, la consola puede tardar más en iniciar, pero si todo va bien, el sistema completará el proceso sin necesidad de que intervengas.
Riesgos de no apagar correctamente la PS5
Saber qué pasa si no apagas correctamente la PS5 implica entender los riesgos a los que te expones, especialmente si este tipo de apagado forzado ocurre de forma repetida. Aunque la consola está diseñada para protegerse, hay situaciones que pueden causar:
-
Corrupción de datos guardados, lo que impide que algunos juegos arranquen correctamente.
-
Fallos en la unidad de almacenamiento, especialmente si se detuvo una escritura de datos.
-
Pérdida de partidas no sincronizadas en la nube, si no usas PS Plus o no realizaste una copia.
Una vez puede no ser grave. Pero si se convierte en algo habitual, podrías acabar con una consola que necesita reinstalar el sistema operativo… o algo peor.
¿Qué hacer si la consola ya se apagó mal?
Si ya cometiste el error y ves el mensaje de “reparación del almacenamiento interno”, no entres en pánico. Lo más habitual es que el sistema solucione el problema automáticamente.
Pasos recomendados:
-
Enciende la consola con normalidad una vez restablecida la corriente.
-
Pulsa X cuando aparezca el mensaje.
-
Deja que la consola complete el proceso de reparación.
-
Cuando finalice, el sistema volverá al menú principal y podrás seguir jugando.
Importante: no apagues la consola durante la reparación, ya que podrías agravar el problema.
Cómo evitar errores al apagar la PS5
Evitar que vuelva a aparecer el mensaje de reparación depende en gran parte de tus hábitos al apagar la consola. Aquí tienes algunas prácticas esenciales que deberías adoptar:
1. Usa siempre el menú de apagado
Accede al menú rápido con el botón PS y selecciona “Apagar PS5”. Es la forma más segura de cerrar procesos y evitar errores.
2. Evita el modo reposo si tienes problemas eléctricos
Si vives en una zona donde hay cortes de luz frecuentes o inestabilidad en la red, lo mejor es apagar completamente la consola en lugar de dejarla en reposo.
3. Utiliza una regleta con protección o un SAI
Una regleta con protección contra sobretensiones te puede salvar la consola. Para un plus de seguridad, un SAI (Sistema de Alimentación Ininterrumpida) te da margen para apagarla correctamente aunque se vaya la luz.
4. Revisa tu instalación eléctrica
Si los cortes son frecuentes, puede que el problema esté en casa. Revisa diferenciales, toma de corriente y asegúrate de que no compartes enchufe con otros electrodomésticos de alto consumo.
Conclusión: prevenir es cuidar tu PS5
Volvamos a la pregunta original: ¿qué pasa si no apago correctamente la PS5? Pues bien, lo que pasa es que corres el riesgo de perder datos, corromper archivos e incluso dañar el almacenamiento de la consola si esta situación se repite. Por suerte, la mayoría de errores se pueden evitar con un par de buenas costumbres.
Apagar correctamente, evitar el modo reposo en ciertas situaciones y proteger la alimentación eléctrica marcarán la diferencia entre una consola que funciona como el primer día… y una que te da sustos cada vez que la enciendes.













