La compra de Electronic Arts por parte de Silver Lake, Affinity Partners y el Fondo de Inversión Público de Arabia Saudí ha encendido las alarmas dentro y fuera del estudio. Empleados y jugadores expresaron su preocupación por el posible impacto en la libertad creativa y en la cultura de la empresa, temiendo censura o despidos derivados de la deuda de más de 20.000 millones de dólares que acompañará la operación.
EA promete independencia creativa pese al cambio de propietarios
Ante la polémica, la compañía ha emitido un comunicado oficial garantizando que su cultura y valores “permanecen sin cambios”. En sus palabras, la compra de Electronic Arts no afectará a su compromiso con la comunidad ni a la autonomía de sus equipos creativos. “Seguiremos guiándonos por nuestros valores de creatividad, innovación, pasión y trabajo en equipo”, señalan en la nota.
EA también subraya que el consorcio inversor “cree en nuestra visión, en nuestro liderazgo y en la fortaleza de nuestros equipos”, añadiendo que su objetivo es “invertir en la creatividad que define a EA” y no limitarla. El mensaje busca disipar las dudas sobre una posible influencia cultural o política por parte del fondo saudí, especialmente tras la dimisión de algunos creadores de contenido de Los Sims 4 como forma de protesta.
Reacciones internas y compromisos de estabilidad
En el documento compartido con empleados, la compañía insiste: “No habrá cambios inmediatos en vuestros trabajos, equipos o quehaceres diarios derivados de esta transacción”. La prioridad, según EA, es mantener la estabilidad del estudio y de sus principales franquicias, entre ellas FIFA —ahora EA Sports FC—, Battlefield y Dragon Age.
Desde el sector financiero, analistas destacan que la compra de Electronic Arts podría suponer una reestructuración a medio plazo, pero también una oportunidad de expansión global gracias a las inversiones saudíes en entretenimiento y tecnología.
Si se cumplen los plazos previstos, la operación se cerrará oficialmente al inicio del año fiscal de 2027, es decir, a partir del 31 de marzo de 2026. Será entonces cuando se conozcan las repercusiones definitivas de una transacción que podría redefinir la independencia creativa de uno de los estudios más influyentes de la industria.
Mientras tanto, EA continúa trabajando en nuevas actualizaciones y proyectos, como el esperado modo Mundo Abierto de EA Sports FC y futuras expansiones para Los Sims 4. La compañía afirma que su “misión de inspirar al mundo a jugar” seguirá siendo el eje de su estrategia tras la compra.













